Luego de la invención del disco flexible en 1967 a manos de IBM, cuatro años más tarde se lanzó al mercado el diskette de 8 pulgadas, en principio de solo lectura y con una capacidad inicial de 80 Kb. Aunque fue evolucionando hasta alcanzar los 1200 Kb, en 1976 An Wang (el fundador de la histórica empresa de informática) se reunió con Jim Adkisson y Don Massaro de Shugart Associates para afirmar que el disco tenía un problema: era demasiado grande.
Lo que Wang tenía en mente era la portabilidad. Así nació la idea y el interés en reducir el tamaño del diskette original. Con la misma apariencia, pero más pequeño. La motivación de Wang venía dada por el gran mercado que tenía su empresa dentro del área de los procesadores de textos; su idea era crear una computadora que pudiera caber en un escritorio, y el primer paso era reducir el tamaño del disco flexible.
El nuevo tamaño sería el de 5,25 pulgadas. Creado en Shugart Associates, permitía lectura y escritura, y tenía una capacidad máxima inicial de 110 Kb. El desarrollo original alcanzaba los 98,5 Kb, pero luego se agregaron cinco pistas más al disco. De esa manera, el diskette de 5,25″ se convirtió en el primer estándar del almacenamiento magnético hasta la llegada de los años 90’s.
En 1972, Shugart había lanzado al mercado la unidad de discos Memorex 650, la primera de la historia que permitía lectura y escritura de datos en discos flexibles. Aquí es importante destacar que para cada tipo de disco flexible creado era necesario crear paralelamente su unidad de disco para la lectura y escritura. Diskette y unidad de disco son términos indivisibles.
Hasta 1977 los diskettes que había en el mercado eran de cara simple y densidad simple. Con el tiempo fueron evolucionando y aumentando la capacidad total de almacenamiento. Aunque la historia oficial dice que los diskettes de doble cara fueron inventados por Tandon en 1978 para el modelo de 5,25 pulgadas, lo cierto es que Shugart Associates había lanzado en 1977 el último disco flexible de 8 pulgadas, que fue de doble cara, doble densidad, y 1200 Kb de capacidad. Es decir, la doble cara la inventó Shugart Associates, y la doble cara en diskettes de 5,25″ la implantó Tandon por primera vez al año siguiente.
Con el diskette de 5,25 pulgadas de Tandon de doble cara y doble densidad nació el primer estándar de éxito durante los primeros años de la década de los 80’s, alcanzando 360 Kb de capacidad total. Que un disco flexible tuviera doble cara no quería decir que hubiera que darlo vuelta, como un disco de vinilo. Algunas unidades de disco podían leer ambas caras a la vez.
Los dos formatos de 5,25″ que se popularizaron fueron los de doble densidad y doble cara de 360 Kb, y el de alta densidad y doble cara de 1,2 Mb de capacidad. A mediados de los años 80’s, ya con la arquitectura de IBM copando el mercado, lo habitual era que una PC-XT (basada en el Intel 8088) tuviera una unidad de disco de 5,25″ de doble cara y doble densidad, y una PC-AT o 286 (basada en el Intel 80286) tuviera una unidad de disco de 5,25″ de doble cara y alta densidad.
Ya bajo el dominio de los discos flexibles de 5,25″, el estándar se popularizó rápidamente entre las home computers. Así, plataformas como Atari, Commodore, Texas Instruments y MSX incorporaron una diversidad de unidades de lectura/escritura de discos flexibles en sustitución del cassette compacto. El diskette, mucho más rápido y de mayor capacidad, se convirtió en el medio de almacenamiento por excelencia.
Recuerdo los diskettes Memorex de 5 1/4 de colores rojo, amarillo, verde, azul y naranja.
Para mí fue un antes y después en 1990 cuando al fin tuve la diskettera Talent MSX DPF-550 para mi Talent DPC-200 (MSX1). Ya estaba cansado de esperar la carga de juegos desde cassette y tenía un amigo que tenía una Talent TPC-310 (MSX2). Una vez esperamos 800 vueltas del datassette para que cargue el «Konami’s Kampire Killer» (Castlevania). Con la diskettera era otro cantar, la velocidad de carga y la facilidad de encontrar las cosas no tenía punto de comparación. Con las cintas de cassette tenías que anotar qué y dónde (en cuál vuelta del datassette) estaba lo que uno almacenaba, y si la carga era con CLOAD, LOAD o BLOAD. Con el diskette solo hacías un DIR (en MSX-DOS) o un FILES (en MSX-BASIC) y tenías el contenido, y si respetabas las extensiones (.BAT, .BAS, .COM, .EXE, etc) sabías cómo se cargaba.
La diskettera de MSX era doble cara y doble densidad (360Kb), y la FAT era la misma que las de las IBM PC, así que casi todo lo que alguna vez tuve en cassette, luego pasó a diskette. Ya en PC pasó luego a hard disk, después a compact disc y finalmente se subió a Github.
Me llamó mucho la atención que las disketteras Commodore, de aspecto mucho más moderno, no eran doble cara, es decir, el disco sí, pero la diskettera no, con lo que para poder escribir en la otra cara, no solo tenías que dar vuelta el diskette, sino que también tenías que cortarle el pedacito de disco que correspondía con el sensor de «write protect» de la unidad de disco, sino no podías escribir. Supongo que habrá salido después alguna versión de diskettera con dos cabezales, pero en ese momento me pareció lamentable. Mucho tiempo después supe que además de ser imprácticas, eran a veces más lentas que un cassette con Fast Load, una crotada (perdón a los fans de Commodore, pero es la verdad).
Volviendo al tema de los diskettes, ya en PC-AT había algunas aplicaciones que te formateaban los discos de 5 1/4″ en 1.6Mb y los de 3 1/2″ en 1.88Mb, pero era medio peligrosa, cuando cambiabas de diskettera capaz que no los podías volver a leer porque las características físicas de la diskettera no te permitía respetar los pasos de los tracks, con lo que terminabas perdiéndolo todo como le pasó a un amigo en su momento, y por suerte estábamos nosotros (sus amigos) para salir al rescate.